Y para la edición de este año tan solo una empresa ha optado a la organización, Acción Calle, que el pasado martes se hacía con el contrato al no haber más competidoras y cumplir las bases existentes. De esta manera se garantiza que habrá Mercado Medieval, y que de las arcas municipales no saldrán los cerca de 40.000 euros que se solían gastar en su contratación.
La edición de este año, llamada Mercado de las Tres Culturas, contará con setenta puestos, que son los mínimos exigidos en el pliego, además de ofertarse espacio para artesanos mirandeses que quieran sumarse a esta actividad en base a las condiciones establecidas. Del total de los puestos participantes 34 serán vinculados a la alimentación, a los que hay que sumar otros 6 puestos llamados de hostelería (bares y restaurantes).
Como ocurriera el año pasado debido a la existencia de las obras de rehabilitación del Teatro Apolo, la zona de la plaza de Santa María, la travesía de Santa María y la calle San Juan quedarán limitadas para colocar los puestos, que se concentrarán en dos sectores principales, el de la plaza de España y el de la plaza del Mercado.
Además de los puestos de venta de productos artesanales, habrá un total de 6 talleres a los que los mirandeses y visitantes podrán acercarse los día 4 y 5 de mayo. Allí podrán ver el trabajo del alfarero, cómo funciona un horno de tejas, la labor del espartero, el funcionamiento de un molino de agua, la elaboración de mosaicos mudéjares y también habrá un obrador infantil.
Mucha calle
Para los niños habrá zonas específicas de juegos y de habilidades con juegos de ingenio de gran tamaño y paseo en burro, y además habrá un puesto de exposición de aves con demostración de cetrería y exposición de lince boreal.
A todo ello se suma la habitual ambientación medieval y la decoración que aprovechará los rincones del casco histórico para embellecerlos con banderas, escudos, toldos de colores, estandartes y grecas.